viernes, 27 de abril de 2018

3.2. Analiza y selecciona herramientas


En esta actividad vamos a realizar una propuesta global que consta de varias partes:


1) Elaborar un listado con las destrezas que el alumno TEA necesita adquirir para lo cual vamos a contar con la colaboración de la familia.

En caso de este supuesto alumno TEA las destrezas más importantes que debe conseguir son:

- Ampliar sus periodos de atención.

- Mejorar su comprensión.

- Saber pedir ayuda.

- Mantenerse calmado y tranquilo.



2) Después nos vamos a centrar en qué cambios es necesario que realicemos en el aula y en la docencia para mejorar las habilidades del alumno TEA en cuanto a la atención, la autonomía y la participación. En mi caso como se trata de un supuesto alumno TEA voy a recoger todos aquellos aspectos que me parecen importantes tener en cuenta al respecto.


- Para mejorar la atención:

Usar apoyos visuales en las explicaciones y presentación de las actividades, etc. como dibujos, pictogramas, fotos, subrayado, uso de colores…

Plantear actividades cortas y ajustadas a su nivel.

Darle instrucciones breves y directas.

Ofrecerle ejemplos.

Utilizar estrategias metodológicas como el moldeamiento y desvanecerlo progresivamente.

Para facilitar su estudio ofrecerle organizadores gráficos como mapas mentales, esquemas, etc.

Tener en cuenta sus motivaciones, intereses y experiencias personales para plantear actividades. Disminuir el ruido ambiental y los estímulos que le molesten para crear un buen ambiente.

Sentar al alumno en un lugar donde se concentre mejor.

Crear un entorno lo más estructurado y previsible posible.

No disponer en su mesa o a su alcance elementos distractores.

Utilizar reforzadores que le gusten.



- Para mejorar la autonomía:

Sentarle con un alumno que le tutorice y le sirva de guía.

Elaborar un horario visual para anticipar las actividades del día con pictogramas, dibujos, fotos, texto…

Organizar o estructurar de forma visual su entorno por ej. con carteles las diferentes dependencias del centro, su material…Creando un entorno predecible y estructurado.

Informarle siempre con anterioridad de los cambios.

Utilizar el cuaderno viajero en coordinación con la familia.

Utilizar una agenda para anotar las actividades, deberes, etc.

Informar al alumno de que se espera de él en cada momento.

Utilizar estrategias como el moldeamiento, el encadenamiento hacia atrás y las autoinstrucciones verbales.

Fragmentar las tareas en pequeños pasos para adquirilos progresivamente hasta realizar la actividad solo al completo.

Plantearle actividades siempre funcionales.

Enseñarle a pedir ayuda cuando la necesite.

Enseñarle a tomar decisiones.

Utilizar contratos de conducta si es necesario.

Tener siempre en cuenta sus motivaciones e intereses.



- Para mejorar la participación:

Trabajar por parejas o en pequeño grupo y que se ocupe de tareas que puede desempeñar solo y de otras que pueda realizar con la guía de un compañero.

Buscar la cooperación de sus compañeros para que le sirvan de apoyo y modelo.

Dirigirnos siempre a él para que participe, por ejemplo preguntándole cosas que sabemos que sabe para que gane seguridad, etc.

Enseñarle reglas para tomar la palabra, conversar, dar su opinión, etc. por medio de historias sociales y en el entorno natural.

Ofrecerle un feedback sobre su comportamiento.




3) Documento digital creado con Piktochart relacionando las destrezas a desarrollar en este supuesto alumno TEA, comentadas anteriormente, con las herramientas inclusivas que pueden utilizarse para ello y una serie de recursos que podemos utilizar.


Comparto el enlace a Piktochart:

miércoles, 25 de abril de 2018

BLOQUE 3: APRENDIZAJES ESCOLARES

3.1. Debate

En este nuevo bloque “Aprendizajes escolares” vamos a realizar varias actividades. La primera de ellas consiste en un debate de reflexión sobre el impacto de nuestras actuaciones educativas en el aprendizaje de nuestros alumnos y alumnas.

1) Para ello, en primer lugar, se propone la lectura de 2 artículos, que son:
  • Una escuela para Juan” (Arbea y Tamarit, 1999)
  • Modelos educativos para una vida de calidad” (Tamarit, 2005)


2) A continuación recojo las reflexiones y conclusiones a las que he llegado tras la lectura.

  • De “Una escuela para Juan”

La reflexión sobre la respuesta educativa adecuada a los alumnos que como Juan, tienen necesidad de apoyo generalizado en prácticamente todas las áreas del desarrollo y que por lo tanto precisan de unos apoyos específicos en su proceso de enseñanza-aprendizaje, lo que requiere una gran reflexión por parte de los docentes, de las familias, de toda la comunidad educativa y de la sociedad en general.
En el artículo se reflexiona concretamente sobre 4 pilares que son el sustento de la acción pedagógica que como docentes deberíamos seguir:
- Un nuevo concepto de normalización en el que nuestra labor como docentes se asiente en la enseñanza de habilidades y la adaptación y ajuste de los entornos.
- La educación que brindamos a nuestros alumnos y alumnas debe centrarse en favorecer su desarrollo personal, el docente debe estar pendiente de sus necesidades para ofrecerle aquello que necesita en cada momento para poder lograrlo sin olvidar que el alumno debe interactuar y construir su propio aprendizaje en la medida de sus posibilidades. Para ello no hay un patrón estandarizado que sirva para todos los alumnos lo que nos obliga a actualizarnos y adaptarnos a cada uno.
- En la educación de nuestros alumnos es fundamental tener en cuenta los aspectos socioemocionales, aprender a regular las conductas y relacionarse socialmente son desarrollos adaptativos que preceden al resto de aprendizajes más curriculares, y no al revés como se creía.
- La necesidad de organizar la escuela de una manera menos formal y estandarizada, donde haya más interacción, experimentación y el aprendizaje sea compartido lo que favorecerá que los aprendizajes sean significativos y funcionales, para todos los alumnos, pero en especial para “nuestro alumnado”.
Como conclusión es que esta teoría sería lo ideal, pero en realidad en la práctica diaria es complicado poder trabajar así, por las muchas trabas con las que nos encontramos a nivel organizativo del centro y del aula, el tiempo del que disponemos, los recursos materiales y personales, la experiencia, la formación, las leyes que parece que van en esta linea pero que después “nos cortan las alas”, éstos entre otros muchos aspectos con los que debemos lidiar y que no es fácil porque la escuela aún es muy “formal y estandarizada”.
Como también recoge el artículo, la educación debería centrarse menos en los aspectos académicos formales de contenidos y más en desarrollar aquellas habilidades que son imprescindibles para la vida diaria como son las habilidades sociales y comunicativas, las habilidades para regular el entorno y autorregular su propia conducta, saber tomar decisiones, resolver problemas, etc. y todo ello de una manera activa por parte del alumno y en diferentes contextos.
Ante estas limitaciones educativas, estos alumnos y alumnas acaban avocados a asistir a centros de educación especial donde se pueda atender mejor sus necesidades y características, lo que nos aleja de los principios de igualdad, normalización, inclusión, etc, que defiende la legislación pero que después es inviable llevar a la práctica.


  • De “Modelos educativos para una vida de calidad”
Este artículo trata sobre el autismo, aunque en realidad es extensible a todas las personas que presentan alguna discapacidad. Se habla de que las investigaciones sobre el síndrome son importantes para poder ofrecer una intervención exitosa basada en evidencias, lo que además requiere tanto de unos servicios como de un trato profesional de calidad y de una reflexión sobre los resultados.
Los modelos educativos, siguiendo la línea el artículo anterior, no se deben de centrar solo en el desarrollo de habilidades, si no en mejorar las condiciones de vida de estos alumnos y alumnas y ayudarles a construir un proyecto de vida, para lo que será necesario un cambio más amplio que el que nos atañe educativamente hablando, haciéndose extensible a nivel social para mejorar las condiciones sociales y culturales y eliminar los prejuicios ante las personas con discapacidad para mejorar su calidad de vida.
Como conclusión, creo que lo que se recoge en este artículo leva mucho tiempo en boca de todos y sería lo ideal, pero a diario vemos las dificultades para cambiar el “chip” y luchar por la igualdad de derechos, de oportunidades y de que estas personas puedan llegar a tener una calidad de vida igual a la del resto de la sociedad sin discriminación por su discapacidad.


3) Investigando por Internet, he encontrado un documento que me ha parecido muy interesante porque sirve para evaluar si nuestros centros educativos son inclusivos y tras los resultados nos ofrece información sobre los puntos fuertes y débiles y qué aspectos mejorar para llegar a favorecer la inclusión. Creo que podría ser útil para aplicarlo a nivel de centro y mejorar aquellos aspectos que vemos como “imposibles” en los artículos leídos.
El documento se titula “Guía para la evaluación y mejora de la educación inclusiva” es de los autores Booth y Ainscow y está traducido del inglés su título original es “Index for Inclusion”.

Comparto el enlace para su consulta (pinchar en la primera línea para visualizarlo correctamente):
%20ARTICULOS,%20PONENECIAS,/Guia%20para%20la%
20evaluacion%20y%20mejora%20de%20la%20educacion%20
inclusiva.%2003.pdf




jueves, 19 de abril de 2018

2.3. Familias: Contrato


En esta actividad se ha elaborado un contrato para un alumno TEA, con el objetivo de lograr la realización de una conducta que queremos por su parte. Para conseguirlo el alumno debe de realizar un esfuerzo que seguidamente va a ir recompensado por un reforzador escogido por él mismo o que sabemos que le gusta. Será necesario negociar para que comprenda la estrategia 1º Esfuerzo-2º Recompensa que le gusta.

Este contrato se ha elaborado en consenso entre la comunidad educativa y su familia y se trabajará tanto en el aula como en casa, para que sea más fácil su aprendizaje y generalización.

La conducta que se ha escogido para el contrato por ser más significativa ha sido: no pegar.
La recompensa o reforzador: jugar en el ordenador.

Obtención de la recompensa en el colegio, puede variar en función de la capacidad del alumno pudiendo espaciar más las recompensas hasta ofrecérsela solo al finalizar la jornada. Al principio se podría ofrecer de forma menos espaciada por ejemplo al finalizar las sesiones de la mañana y al finalizar las sesiones de después del recreo antes de irse a casa. Habrá que considerar si es más efectivo y es necesario menor tiempo de latencia entre la conducta y la recompensa para obtener mejores resultados.

Obtención de la recompensa en casa: hay que establecerla con la familia, por ejemplo al cabo de X tiempo o después de realizar alguna tarea en casa, etc.

Uso del contrato visual: hay que explicar al alumno el contrato que debe cumplir, lo que se ha asociado a las emociones de contento y triste, si pega se coloca en el registro la acción que ha realizado y un pictograma con el ordenador con un aspa que indica que no va a jugar, si no pega se coloca esta acción y el pictograma del ordenador lo que indica que puede jugar.
De esta manera irá asociando cada conducta con su consecuencia e interiorizará que para conseguir lo que quiere primero tiene que realizar la conducta adecuada.

Comparto el enlace al contrato y a los registros que he elaborado con la aplicación Canva.

Creative Commons License

martes, 17 de abril de 2018

2.2. Conductas positivas


La actividad que llevamos a cabo en este apartado tiene que ver con el apoyo conductual en el aula y en concreto con el refuerzo positivo.
A continuación voy a explicar la actividad que he realizado por pasos para que quede más clara.

1) En primer lugar, se ha llevado a cabo una actividad con los alumnos y alumnas en el aula para conocer que conductas positivas realizan a lo largo de la jornada escolar. La actividad que se les planteó consistió en por pequeños grupos, 5 grupos de 4 alumnos, pensar que acciones o comportamientos buenos o positivos realizan en el aula con sus compañeros, profesores, etc. y los anoten en una lista. Después cada grupo leyó en voz alta los suyos. Algunos de los más significativos fueron:

- Ayudar a los compañeros.
- Portarse bien en clase.
- Participar levantando la mano.
- Tener las cosas ordenadas.
- Traer siempre los deberes hechos.
- Compartir las cosas con los demás.
- Jugar juntos en el recreo sin pelearse.
- Hacer la fila bien.
- Etc.

2) A partir del resultado de la actividad se han escogido 3 de esas conductas positivas que se puedan reforzar diariamente en el aula, estas son:

- Ayudar a los compañeros.
- Compartir las cosas con los demás.
- Participar en clase levantando la mano.

3) Después se ha elaborado un póster digital con la aplicación Piktochart con el siguiente cuadro registro para potenciar esas 3 conductas con el objetivo de colgarlo en el aula y poder reflejar la evolución de cada alumno respecto a esas conductas. El póster elaborado tiene 3 partes, cada una consta de una tabla para cada conducta para que sea más fácil de seguir por los alumnos y más sencillo de utilizar. Es un ejemplo, que hay que cubrir con los datos indicados y los nombres de todos los alumnos y alumnas.

La forma de utilizarlo es observar diariamente el desarrollo de las 3 conductas en cada alumno y marcar al final de la jornada en el póster el refuerzo con un gomet, verde si se ha cumplido satisfactoriamente y amarillo si se ha cumplido pero puede mejorar, nos fijamos en las conductas positivas puesto que son las que queremos reforzar.

La metodología a seguir va en la línea de la economía de fichas, pero reforzando solamente las conductas esperadas cuando sean positivas y no prestando atención a las negativas. Para potenciar en los alumnos la realización de las conductas deseadas se fijará con antelación y consenso con los alumnos una recompensa que obtendrán de manera individual y/o grupal al final de la semana o en el tiempo acordado con ellos, por ejemplo: realizar alguna actividad que quieran, un pequeño obsequio, juegos, etc.

Los pósters se irán renovando en el aula mensualmente para poder seguir anotando. Cuando estas conductas mejoren se pueden ir cambiando por otras.
 
A continuación comparto el enlace al póster elaborado con Piktochart.






lunes, 9 de abril de 2018

BLOQUE 2: REGULACIÓN EMOCIONAL

2.1. Análisis de conducta y Programa de actuación.


En esta actividad se realiza el análisis de una conducta disruptiva de un alumno TEA "hipotético" para conocer las causas de la misma y poder realizar un plan de acción.

Antes de centrarse en los dos puntos de esta actividad, voy a realizar una breve descripción del alumno: tiene 9 años, está escolarizado en EBO1, carece de lenguaje oral y para comunicarse utiliza fotos, pictogramas y se está iniciando en el uso de algunos gestos.

1) En primer lugar, se lleva a cabo la recogida de información sobre el desarrollo de dicha conducta, lo que se anota en el siguiente registro de la conducta.


REGISTRO DE LA CONDUCTA: Gritar cuando no quiere realizar una actividad.


Historial de la conducta

Dicha conducta se lleva manifestando durante dos cursos aproximadamente. El alumno la manifiesta cuando se le plantea realizar alguna actividad y no quiere. No ocurre siempre ni ante las mismas actividades, lo que se presupone que hay momentos en que puede no apetecerle realizar la actividad que se le propone y lo manifiesta así.


Antecedentes

Esta conducta se manifiesta con los docentes que le imparten clase, principalmente PT y AL en sus aulas, tanto si hay más alumnos como si está él solo. Si se encuentra irritable porque esté enfermo o se le saque de su rutina la conducta puede darse con más frecuencia e intensidad.

Topografía

La forma física que adquiere la conducta es gritar y a veces puede ir acompañada de llanto.


Función

Se presupone que la motivación con la que el alumno realiza esta conducta es para evitar realizar la actividad que se le propone si él no quiere.



Consecuencia


El alumno se altera mucho lo que también afecta a sus compañeros y a los docentes.

Se le regaña.

Se pierde mucho tiempo intentando calmarle.

No se pueden realizar actividades programadas de acuerdo a su plan de trabajo lo que repercute en su progreso.



2) La principal hipótesis de la conducta sería la función comunicativa. Puede ser que el alumno no sepa comunicar de otra manera apropiada que no quiere realizar una actividad.

3) Después del análisis conductual y de conocer la hipótesis de la conducta es el momento de llevar a cabo un plan de acción para reconducir esa conducta y convertirla en positiva con nuestra intervención lo que se recoge en el siguiente programa de actuación.

El Programa de actuación sobre la conducta que se propone se basa en el Apoyo Conductual Positivo que tiene como principales premisas anticiparse a la conducta detectando las dificultades que pueden darse en el entorno del alumno y dotarle de facilitadores de la comunicación y de la conducta.
El enfoque que se plantea seguir en este caso es el enfoque proactivo, de manera que se pueda mejorar el comportamiento del alumno a través de experiencias positivas, para ello debemos estar alerta y anticiparnos a su conducta para en ese momento poder plantearle una alternativa adecuada a la misma y que la sustituya.
La habilidad a enseñar al alumno sería que aprenda a comunicar que no quiere realizar la actividad pero de una manera alternativa sin realizar la conducta de gritar, por ejemplo señalando un pictograma que indique “no”, haciendo un gesto con la cabeza, o señalando en pictogramas la actividad que prefiere realizar.

Para reducir las conductas disruptivas se utilizan los facilitadores de la conducta como ayuda, entre ellos tenemos el moldeamiento y los SAAC que son los que vamos a utilizar en este caso.
El moldeamiento le ayudará a entender las consignas y que se espera de él, será útil dirigirle la mano para que interiorice los movimientos que debe realizar para emitir la conducta adecuada para que los interiorice.
El uso de SAAC, al carecer de lenguaje oral, será la alternativa que necesitamos que aprenda a utilizar el alumno de una manera funcional para comunicarse ante diferentes situaciones. En este caso se utilizará el pictograma de que indique “no” y se acompañara del mismo gesto con la cabeza.
Con ambas estrategias, queremos lograr el desarrollo de una conducta positiva que sustituya a su conducta disruptiva.

Un ejemplo de situación de aprendizaje en la que se intentaría enseñar la conducta positiva empleando los facilitadores comentados sería:

Antes de presentarle una actividad nueva hay que anticipársela siempre con pictogramas e intentar preveer por su expresión facial y corporal si se va desencadenar la conducta disruptiva de gritar, en ese caso hay que intentar detenerla moldeando su mano para señalar el pictograma de “no” y realizar el mismo gesto con la cabeza a la vez que se da la vuelta a la tarjeta o pictograma que anticipaba la actividad a realizar para que asocie que "NO" tiene que ver con no realizar esa actividad. Y ofrecerle un reforzador que le guste, por ejemplo un juguete, una pegatina, etc.
Esta secuencia será necesario repetirla muchas veces hasta que la comprenda y la utilice.
Así mismo será útil realizar un registro de la modificación de la conducta recogiendo aspectos como: docentes implicados, acciones realizadas, temporalización, mejorías observadas, cambios a realizar, reforzadores, etc. 

Debe haber una buena coordinación entre todos los profesionales que trabajan con el alumno para seguir unas directrices de actuación comunes, así como con la familia.